"Durante la pandemia, la comprensión de un humor universal se hizo más fácil"

El brasilero J.Bosco es uno de los humoristas gráficos más reconocidos a nivel mundial. En el 2020 creó junto a otros artistas la revista digital SUPAPO, que une a una selección internacional de dibujantes

J. Bosco (João Bosco Jaco de Azevedo) es un humorista gráfico brasilero que ha recibido premios en certámenes de todo el mundo, y que junto a otros dibujantes creó la revista digital SUPAPO, una suerte de selección internacional con los mejores artistas del rubro que periódicamente comparten su trabajo por las redes y lo ponen al alcance de todos. Reconocido por su particular manera de encarar temáticas sociales, por su estilo artístico y por la convicción de cuestionar desde el arte problemáticas que llegan a ser universales, J.Bosco tiene ganado un lugar entre más destacados los humoristas gráficos del mundo.

En diálogo con Casa Tomada, J.Bosco comentó lo que fue el proyecto de SUPAPO, que no para de crecer en contenido y calidad, y a la vez, analizó los alcances del humor, el impacto de la pandemia, las posibilidades que brinda realizar una publicación online y el trabajo de los artistas brasileros.

- En medio de la pandemia, lanzaron un ambicioso proyecto para la revista, ¿cómo surgió la idea de SUPAPO?

- Sí, la revista surgió de esa manera, ya que todos se encerraron en sus casas, y algunos artistas hicieron vivos y shows desde dentro de sus hogares. Yo de Belém do Pará, Marcelo Magon de Río de Janeiro y Waldez de Blumenau, decidimos crear algo diferente en el ámbito del humor, una revista o un periódico, todo valió la pena en ese momento. Creamos el nombre “SUPAPO”, una jerga que sugiere y nos envía la sensación de bofetada, puñetazo. Magon diagramaba las dos primeras ediciones solo, yo hacía el diseño gráfico y él seguía los modelos a través de los zaps donde nos íbamos comunicando. Luego cambié la línea editorial y la maquetación, haciendo la revista más atractiva y con nuevos invitados internacionales. Comenzamos con 20 páginas, luego nadie esperaba el éxito tan rápido y lo aumentamos a 40 páginas. La idea inicial vino de Magon, que no estaba publicando, y me pidió que creara algo en la pandemia.

- ¿Cuáles considera que son los principios básicos que guían la publicación?

- La revista está enfocada al humor en general, específicamente al político, dentro de una línea gráfica más atrevida. Siempre usamos una caricatura más gráfica en la portada para darle un tono elegante en la revista, con entrevistas y textos de humor, crónicas, artículos del día a día. Empezó quincenalmente, ahora con un mayor número de páginas pasó a ser mensual.

- ¿Buscan difundir la obra de grandes autores en todo el mundo? ¿Piensan darle lugar a nuevos artistas?

- Siempre hay nuevos dibujantes enviando dibujos, el espacio es grande, pero hay que tener cuidado en las selecciones para no perder calidad.

- Entre tus páginas tienes grandes nombres como Ares de Cuba, Boligán de México y De Angelis de Italia, ¿cómo ha ido sumando tantos buenos comediantes de todo el mundo como colaboradores?

- Hice una invitación a todos cuando la revista estaba en el inicio de las ediciones, tenía el cariño de todos estos gigantes del humor gráfico mundial. Ares y Boligán siempre están en portada, con sus trabajos increíbles. Cada portada es diferente a las demás, en diseño, contenido gráfico, que le han dado su encanto a SUPAPO.

- Desde SUPAPO, ¿consideran que el humor se puede hacer con todo o hay cuestiones que deciden no abordar?

- Tenemos de todo de lo que pasa en el mundo, simplemente no vamos a darle munición a la caricatura político-religiosa, atacar a las religiones, no coincide con la revista. Los temas sociales son más importantes, cubren el universo creativo de los dibujantes: medio ambiente, cuestiones económicas, fútbol, paro, miseria, hambre mundial.

- Claramente hay una parte del humor que es universal y se entiende en todo el mundo, pero también hay regionales. ¿Cómo diría que es humor brasileño?

- El humor brasileño es divertido, Brasil tiene una historia de grandes caricaturistas politizados, por eso SUPAPO tiene esta variación de temas para ser entendido en todo el mundo. Durante la pandemia, la comprensión de un humor universal se hizo más fácil. Brasil se hizo conocido, mundialmente por el descuido de cómo se manejaba el tema de salud en el país, prácticamente nos quedamos sin un gran asesor, un líder para liderar y garantizar la protección de la salud. SUPAPO no es muy regional, pero sí universal.

- El formato de la revista es online y gratuita, ¿qué cosas positivas y negativas encuentran al distribuirla de esta forma?

- Al ser online, la visibilidad es mayor y el retorno es gratificante, no ganamos dinero con ello, pero es una forma de mantenernos vivos haciendo y editando una revista en este momento crítico. Estoy feliz por reunir amigos y nuevos socios que llegan de todo el mundo para participar. Los cubanos son brillantes, producen mucho, los argentinos también, la propuesta de la revista fue ésta, sumar muchos dibujantes de todo el mundo en una bonita revista. No hay posibilidad de polarización ideológica en la revista.

- ¿Otras publicaciones del mundo sirvieron de inspiración para el montaje de la revista?

- De hecho, empezamos a armar e investigar revistas con un tono más gráfico, con un diseño diferente, utilizando un diseño moderno y limpio. Elegimos fuentes y texto atractivos. La diferencia es mantener nuestro propio estilo. Nuestra preocupación es hacer que cada edición sea diferente a la otra.

- El humor gráfico y el texto humorístico conviven en SUPAPO, ¿cómo es la dinámica que los une en el diseño?

- Aconsejamos a los empleados una semana antes de que la revista comience a publicarse. Los textos dan brillo a las ediciones, mezclando viñetas y caricaturas, para enriquecer cada página. Todo hecho con el mayor cuidado.

- ¿Qué respuestas recibió de los lectores de SUPAPO?

- Muchos piropos, compartidos, pedidos de publicaciones y, sobre todo, que no se acabe la revista (bromea J. Bosco).

Luis Schlossberg