"Año de mierda", la revista digital de Alegría con su característico humor

El trabajo de destacados humoristas gráficos de todo el país se concentra en esta edición especial que el sitio publicó de manera virtual

La portada de la revista con el genial dibujo de Lele.

Luego de un año de intenso trabajo en las redes, y un par de anuarios en su haber, Alegría publicó de manera virtual su primera revista con material inédito, bajo el título “Especial año de mierda”, con el trabajo de los más destacados humoristas gráficos argentinos. En diálogo con Casa Tomada, El Nolo (Manu Gómez), coordinador de este proyecto, se refirió a la posibilidad de desarrollar la revista y el desafío de hacer humor gráfico en Argentina en la actualidad.

“La idea de armar una revista venía dando vueltas hacía un tiempo, en todas las ‘reuniones alegres’ se tocaba el tema”, indicó el dibujante, y aseguró: “El proyecto tomó fuerza este año, cuando nos dimos cuenta que hacer un cuarto anuario no iba a funcionar ni a palos. Primero porque íbamos a seguir dándole cabida y relevancia al nefasto gobierno del amigo Mauri (por Mauricio Macri), que tanto costó dejar atrás y segundo porque con la llegada de la peste oriental iba a ser prácticamente imposible distribuir un producto como el anuario. Hacerlo digital hubiese sido un bajón, es algo para tenerlo en papel, ¡un documento sobre el Gobierno del mal!

- Por el momento es digital, ¿piensan en la posibilidad de llevarla al papel?

- Es nuestro sueño húmedo (se ríe). Este primer número, mejor dicho “Número 0”, sale digital por esta imposibilidad de poder distribuirlo bien. Y bueno, también para probar suerte, para ver si podemos generar un producto que esté bueno, bien editado, que nos deje contentos y que guste sin que signifique un gran fracaso editorial. Pero la idea de la revista es que salga en papel.

- ¿Cómo surgió todo el proyecto de Alegría?

- Alegría nació en 2016, cuando un grupete de dibujantes, como para hacerle frente al horror del neoliberalismo gatuno, decidió armar una página de humor político y probar a ver qué onda en las redes. En ese grupo original estaban Ernán, Semola Souto, El Polaco Scalerandi, Ariel LV, creo, entre otros. Después a ese grupo se sumaron un montón de dibujantes más y entre bajas e incorporaciones ahora debemos andar en los 20 dibujantes “maomeno”, que dibujamos chistes casi que periódicamente, y como 15 más que colaboran esporádicamente pero que cuando lo hacen se mandan maravillas. Tenemos un plantel lleno de grandes talentos, perdón por el autobombo (bromea Gómez).

- ¿Cuál es el espíritu y los códigos que mueven al espacio?

- Somos muy poco solemnes, digo, para hacer esto tenés que dejar de lado la solemnidad. Tomarte en serio el laburo, obvio, pero no querer "concientizar" o "hacer pensar" para eso están otros. Estamos para hacer reír. Creo que esa es la "filosofía" que venimos manteniendo del día cero, nosotros hacemos reír. También somos conscientes de la tradición de humor político que hay en el país y buscamos hacer lo mejor que podamos para estar más o menos a la altura de eso. La vara está súper alta igual (se ríe). Digo, uno ahora ve la revista Humor, por ejemplo, y se cae de culo, es increíble el laburo que hacían esos tipos y la genialidad que está presente en todos los números. Y te dan ganas como de hacer algo que medianamente le haga justicia a eso, te moviliza. Por otra parte, la gran regla de Alegría, lo que sería el Primer Artículo de la Constitución Alegre es: Todo Dibujado. No va el collage o la photomanipuleishon. Todo a lápiz o tinta o trazo de Wacom. Y se cumple a rajatabla. Creo que eso es lo que nos separa de otras páginas de humor político y nos pone en línea con las viejas revistas del género. No hacemos memes, hacemos humor gráfico, dibujado.

Además, El Nolo sostiene que, después “el laburo es muy de ayudarnos, de debatir los chistes, de hacer correcciones”, indica, y asegura: “En el grupo conviven varias opiniones políticas, pero todos contra el neoliberalismo y el imperialismo yanqui”, aclara. Comenta que suelen armarse debates, “con chicanas amorosas”, bromea, y completa: “Nos conocemos todos, siempre con la mejor onda y nunca por el lado del bardo, o el deseo de censurar al otro. Muuuy pocas veces pasó.

- ¿Cómo les funcionó el sistema de los "cafecitos" para los artistas? ¿La gente hace su aporte?

- La movida de los cafecitos estuvo muy bien (es decir, una contribución para los artistas a modo de paga por el trabajo hecho). La gente se copó y nos pagaron unos cuantos. Igualmente querer hacer plata a partir de cafecitos es una boludez, más en este contexto. Había un par de memes dando vueltas muy graciosos y muy reales, que decían algo como “el mundo es un quilombo y los artistas pidiendo cafecitos”. Y uno se siente en esa, ¿viste? Ésto es un despiole y nosotros pidiendo plata por ser un escapismo. Por eso sorprendió que el público se ponga la diez y nos den una mano. Es un gran incentivo darte cuenta que quien nos lee reconoce el laburo atrás de Alegría y a pesar de que no hay un mango en el mundo te deja unos pesitos. Por eso también decidimos que la revista salga a un precio súper accesible, casi que simbólico, ya que podemos obviar gastos de impresión vamos a hacer algo a lo que la mayoría tenga acceso.

- Cuentan con colaboradores de todo el país, ¿cómo es ese vínculo con los humoristas?

- Eso es algo muy lindo que tiene el grupo, hay gente de todos lados. Podemos decir que escapamos del maldito “porteñocentrismo”. Por suerte, la muchachada del interior colabora frecuentemente entonces estamos en contacto siempre. Lo único bajón es que en las reuniones presenciales es difícil que estén, pero bueno, esas son preocupaciones del mundo pre-apocalíptico.

- ¿Hay grandes talentos que están ocultos y no encuentran dónde difundir sus trabajos?

- Olvidate. Está lleno, Instagram está repleto de artistas que la tienen atada y que están para publicar. El tema es que laburar del dibujo está jodido. Falta industria, falta alguien que agarre a toda la monada que anda suelta y que tiene talento y disciplina y los edite, pero de corazón, para mover la cosa. Acá en Alegría está lleno de gente que pudo publicar sus primeros laburos gracias a la página. Me incluyo, y es una deuda enorme que tengo con los locos estos. Ver el laburo de uno impreso en los anuarios es tremendo. La única manera que encuentro como de retribuir eso es mandar chistes y dar una mano en lo que pueda en los proyectos que surjan.

- ¿Resulta difícil para los dibujantes conseguir espacios laborales en los grandes medios?

- Sí, totalmente. Como te decía, no hay industria y aparte que los grandes medios ya están cubiertos en cuanto a humor gráfico y por tipos que son inamovibles. El único medio que da cabida, que igualmente es súper independiente y a pulmón, es la revista Barcelona, con quienes colaboramos hace ya como 3 años. Pasa que aparte, nuestro laburo no va para los medios hegemónicos. Ya hay una línea política muy marcada que va en contra del establishment que proponen ellos. Habría que hacer otra cosa o bajarse los lienzos y hacer "humor político light".

En relación a este vínculo con Barcelona, luego de estar a disposición con preventa, la revista ahora se puede conseguir con un precio muy accesible desde el sitio digital de la revista humorística de tirada nacional.

Autorretrato de El Nolo.

- En este marco complicado de la industria, ¿las redes sociales son una alternativa posible para que los humoristas muestren lo que hacen?

- Ahora sin redes no llegas a ningún lado. No hay una revista impresa a la que puedas mandar tus laburos a ver si gustan como (creo) que era antes. Para los que llegamos a este mundo hace menos de 25 años, más o menos, el único lugar que se nos dio para dar a conocer nuestro laburo son las redes. Igualmente, conseguir visibilidad y seguidores es un quilombo. Hay que tener mucha suerte o hacer algo que medio vaya con la onda de la cultura de Internet y los memes, que igual también es un laburazo ojo, es un mundo que está constantemente mutando y lo que ayer era gracioso, hoy ya es viejo y está re quemado. No es un lugar muy plural para darse a conocer, es muy difícil que alguien que vaya por un lado más narrativo, de novela gráfica ponele, pueda pegarla en las redes. Es un espacio más de humor, pero un humor efímero, rápido, fácil.

- Hacía años que no se publicaba una revista con estas características, ¿influyen aspectos económicos y políticos en esto?

- Seguro que sí, no me atrevería a afirmar nada porque no estuve, pero creo que “El Gilgamesh Riojano” de patillas graciosas hizo mierda todo. Ya los juicios a la Humor fueron un golpe bajísimo (la revista sufrió más de 40 embates judiciales por sus publicaciones), porque es como un ataque a la libertad de expresión y calculo que no habrán dado ganas de lanzarse a hacer algo parecido, o hacías algo medio edulcorado, light o te comías un juicio y tenías que hipotecar la vida para poder pagarlo. Después, imprimir está caro y tampoco tenés la certeza de que vayas a recuperar lo invertido. La realidad es que tampoco se compra mucha historieta nacional, y encima lo nuestro tiene un público medio específico, los que estamos de este lado de la grieta. Lo que si estoy seguro, es que cosas para publicar hay y una banda.

- Algo que se le suele criticar al mundo del humor gráfico es la falta de lugar a mujeres dibujantes, ¿qué piensan sobre esto?

- Es un tema. En Alegría siempre hubo pocas mujeres, hoy menos que antes. Colaboran esporádicamente dos dibujantes tremendas, Nana y Lucy. Igual si, en general en el ambiente del humor político hay pocas mujeres. Debe haber un montón que laburan re bien y te cagás de risa leyéndolas, pero no las conozco. Es muy raro, porque no creo que estemos en un ambiente machista, digo, somos todos medio “progres” y no hay rollos con eso. Desde Alegría, obviamente, siempre invitamos a que manden material para la página. Estaría genial que el plantel se homogenice un poco y no seamos sólo un grupo de barbudos. Porque aparte seria súper enriquecedor sumar otra mirada, otra realidad, otro enfoque.

- Un texto que abre la revista es "Especial año de mierda", ¿qué lugar creés que tuvo el humor en este contexto de pandemia?

- No creo que haya ayudado a la gente a salir adelante. En realidad no lo sé, pero en caso de ser así, no deberíamos ser nosotros los que lo digan. Igualmente, sería muy lindo saber que ayudamos a alguien en este año choto. Yo creo que el humor acompañó, pero como acompaña siempre. Es una manera como de buscarle una vuelta a la realidad, de hacer más digeribles las cosas, pero ni en pedo es algo "salvador".

Luis Schlossberg